miércoles, 23 de enero de 2008

INSTRUCCIONES PARA ENTENDER EL PALAU DUCAL
de Gabriela Julia Fernández-Yáñez

Al acercarse al Palau Ducal desde el Ajuntament usted verá un gigantesco cuadrado de piedra similar a un terrón de azúcar. No tema, hay cosas peores.Primer paso: se debe pensar o visualizar que usted está entrando en el conocimiento de una mujer, del cuerpo de una mujer, más exactamente de Lucrecia Borja.Las mujeres en general tienen zonas muy visibles, amplias, claras; otras semivisibles y otras ocultas, húmedas y oscuras. En el caso de Lucrecia también hay que tener en cuenta que fue moneda de cambio y que por lo tanto en el Palau usted también encontrará estas zonas (como esas horribles y despersonalizadas aulas u oficinas). Es decir, algo hay que entregar para negociar.Segundo paso: las zonas visibles son lo que son pero lo que usted necesita saber es que dentro del Palau todo lo que vea no es lo que es. Por ejemplo, hay paredes que se mueven, espejos que no existen, puertas secretas, habitaciones ocultas, ventanas que se van achicando (por el llamado cortejo medieval), ventanas que comunican con el demonio y más. Como le digo, sospeche de todo que nada es lo que es.Paso final: entonces si usted tiene claro que no va a ver un edificio histórico, si no que va a hacer un recorrido por el cuerpo de una mujer, en este caso Lucrecia Borja, podrá entender todo lo que vea, toque o lea en el Palau Ducal de Gandía.Recuerde que lo peor que le puede pasar es encontrarse con una exposición de arte moderno dentro de sus salones. ¡Puaj!

No hay comentarios:

Publicar un comentario